sábado, 3 de septiembre de 2011

Chocolate



Mi madre siempre fue mi mejor maestra. Ella me enseñó a no hacer ruidos en la mesa, a sentarme derecha, a hablar con propiedad. Me enseñó a no temerle a las alturas, a la oscuridad, a las arañas, a los ratones. Me dijo alguna vez todo lo que pasaba en mi cabeza, no es necesariamente falso. Me hizo aprender todas las recetas que hay que saber para tener un negocio exitoso, exquisito. Me hizo contar la cantidad exacta de granos de sal necesarios para lograr la sopa perfecta, medí los milímetros que debían medir las calabacitas del caldo de pollo, la cantidad de ramitas de canela y flores de jamaica necesarias para lograr ese aroma tan particular que sólo su ponche de frutas tenía. El ingrediente secreto de sus galletas de café, el de su arroz con leche, el del caramelo de su flan con nueces. Me enseñó que la cocina es una ciencia, tan útil y maravillosa como cualquier otra. Conocí todos los utensilios de cocina habidos y por haber, el secreto familiar de cómo pelar un ajo en dos movimientos, la hierba silvestre que ella misma descubrió comestible y cómo plantarla para que creciera bien. Mi madre me enseñó todo menos una cosa; esa fórmula de chocolate que sólo tú sabes que conozco, esa magia pura que me haría más feliz que cualquier cocina del mundo, ese líquido café con el que embrujé tu corazón. Ese, lo aprendí yo solita.

9 comentarios:

Unknown dijo...

Por eso les decimos "brujeres".
Cuando uno menos lo piensa, ya está totalmente hechizado.
Y sigue siendo cierto eso de que al corazón se llega por el estómago.

Pinchesendic dijo...

Hay ocasiones en que uno no tiene que beber nada para quedar embrujado. Se necesita nada más de un buen corazón y belleza en el alma para quedar prendado de alguien.
Relato ameno para pasar un rato pensando en las artes culinarias.

Alejandro Aguilar dijo...

Como dijeron arriba, solo las mujeres son las rsponsables de que los hombres estemos embobados con usted. Eso de "yo solita" me sono muuuy chingon, asi a la ves de inocente y triunfal.




Dark Angel

Alejandro Aguilar dijo...

Perdon, es "ustedes"

LUIS TORRES dijo...

Eres muy visual, sera por tus dotes de fotografa?

Me diverti leyendolo. Saludos

Anónimo dijo...

Qué buen remate, como siempre, me gusta tu manera de narrar, no sé, pero leerte siempre me deja como en mood buena vibra.

/ROS/

Dr. Gonzo dijo...

Qué historia tan bonita. Transmite que algo está bien. Algo bonito :)

la MaLquEridA dijo...

Con lo que te enseñó tu madre y tu sazón aprendiste a hacer ese chocolate convertido en elixir de amor.


Saludos.

. dijo...

bueno y esq no todas las brujas deben ser malas,,,

ahi esta la amiguita de gasparín y la bruja de este cuentito jajaja


saludos!!!