domingo, 2 de octubre de 2011

Abrir y cerrar de ojos


Desde pequeño se identificó con las imágenes, pero no las imágenes como tal, sino cuadros, momentos y lugares, le gustaba capturarlas, veía algo que le gustaba y de inmediato fijaba su mirada con los ojos lo mas abiertos posible y en seguida los cerraba apretándolos con mucha fuerza, para que así en su mente, según creía Renato, se guardaran más fielmente esa imagen.

La utilización de las imágenes capturadas por Renato, eran para su uso exclusivo, todas las noches antes de dormir, escogía mentalmente la mejor escena capturada, la seleccionaba, se enfocaba, la recreaba, con pequeñas variantes, en las que, el aparecía, el la disfrutaba, el se encontraba en ese cuadro mental que había robado en algún momento.

Internamente, el nunca creyó que esto que hacía era robar, ya que, los instantes estaban ahí, el solo los disfrutaba en la soledad de su habitación y les añadía esa variable que para su gusto les hacía falta, él. Con el paso de los años, se empezaba a dar cuenta que esto era un problema, ya que lo alejaba de la realidad, ya no participaba en escenas con personas de la vida real, se limitaba a robar escenas y por las noches a divertirse y a recrear sus propias escenas.

A una edad mas adolecente, seguía adoleciendo del mismo mal, le gustaban las capturas de momentos, se quedaba mirando el parque de su escuela, el parque de su unidad habitacional, y justo en el momento que sucedía algo, el lo capturaba. Debido a este extraño comportamiento, carecía de amigos, ya que nadie lo entendía y los que se acercaban, terminaban alejándose, ya que nunca los veía directamente; Renato, creía que desperdiciaba su mirada con solo observar a una sola persona.

A pocas personas se les da el privilegio en la vida de trabajar en aquello que siempre han soñado, a Renato le fue concedida tal dicha, ya que, entró a trabajar como ayudante de fotógrafo en un estudio. El trabajo de Renato, consistía en diversas y tediosas actividades que constaban desde preparar las mezclas venenosas de los ácidos para el revelado de las fotografías, cambiar las bombillas de los reflectores hasta el acomodar los fondos para las fotos de quinceañeras. Pero había dos actividades que siempre le gustaban realizar: Cortar y acomodar las fotografías reveladas en sus sobres, y entregarlas a sus respectivos dueños o personas que las llevaron a revelar.

El trabajo era genial, ya que, no tenía que salir para adquirir mentalmente situaciones ajenas, personas nuevas, lugares comunes o nuevos, todo un buffer gráfico para alimentar su peculiar entretenimiento.

Con el paso del tiempo, opto por contemplar las fotografías y no robarlas en su mente, sino que al verlas, crear la historia, y así no se desgastaba tanto. Veía tantas vidas como quería, las vidas de las parejas que llevaban sus fotos de bodas, sus fotos (casi pornográficas) de su luna de miel, sus fotos de sus hijos y después, por separado las fotos de cada cual con su cada amante, o al menos eso creía Renato. Con el paso de los años, había adquirido un gusto placentero por seguir personas y a inventarles una historia y hasta creerse su amigo mas íntimo.

Eventualmente el estudio fue perdiendo clientela, la era digital, anunciaban algunos, había llegado, el sabía que la fotografía nunca dejaría de ser lo que era, que solo era una racha moderna impuesta por algún país extranjero.

Ángela Estrada decían los 9 frascos con rollos para revelar, al revelar las fotos e irlas acomodando una a una en los sobres pertinentes, se dio cuenta de algo mágico, algo que nunca había sentido jamás, se sentía atraído y sentía una ansiedad de seguir absorbiendo imágenes de Ángela, con Ángela, donde Ángela. Ángela, era nueva en la ciudad y era además de una fanática a la fotografía una mujer, algo que Renato, nunca experimentó.

53 semanas pasaron, Renato, seguía, cada 2 semanas, las fotografías que Ángela llevaba a revelar, las fotos con sus amigos en alguna fiesta, las fotos de su escuela, las fotos de su graduación, las fotos con su antiguo y su actual novio, y cualquier otra cantidad de fotografías personales, que cada dos semanas se adueñaba Renato momentáneamente. Renato no conocía el amor, pero si lo hubiera conocido, esta fijación seria claramente un buen ejemplo de un enamoramiento.

Ángela era curiosa y gustaba de ver la sudoración y el comportamiento torpe de Renato cada que ella llegaba al estudio, y Renato, obviamente disfrutaba que Ángela llegara al estudio, no para verla, porque nunca pudo sostenerle la mirada, sino porque sabía que llevaría 1, 2 o si tenía suerte, 3 rollos de 48 exposiciones para revelar.

Esa semana fue la excepción, Ángela llevó 1 solo rollo de 12 exposiciones. En el cuarto de revelado, Renato, ya como encargado de revelar las fotos, vio que solo había 3 fotografía. Al sumergir el papel fotográfico impactado con los fotones de aquellas antiguas maquinas en el ácido, poco a poco se revelaban unas escenas algo familiares para Renato, Colgó las fotografías y al irse poco a poco secando, se iban desvelando las escenas. La cara de Renato, se desencajo por completo, bajo el destellante resplandor de la luz roja del cuarto de revelado, la escena no le parecía familiar, era su escena, Ángela lo había retratado 3 veces mientras andaba por la tienda sin que él se diera cuenta. Renato se sintió, observado, sucio, violado por un alguien que no le había permitido verlo, tembló y cayó al suelo bajo un ataque súbito de pánico y vergüenza, mientras caía solo aquellas 3 imagenes pasaron por su mente.

Sirenas, vecinos, muchas fotografías llenaron el lugar a la semana siguiente. Los forenses no pudieron determinar la causa real de la muerte, solo tomaron fotografías de la escena y vieron detenidamente como había 3 fotografías del individuo colgadas en ese cuarto carmesí.

-Que desagradable!!! Con un ojo abierto, ha muerto con un ojo abierto, parece que nos está espiando- Dijo la joven reportera que recien habia tomado la fotografía del difunto Renato.

6 comentarios:

Pinchesendic dijo...

Debo decirte que los primeros tres párrafos fueron muy buenos. desde ahí pienso que la historia fue perdiendo, a partir del cuarto párrafo, y no solamente en cuánto a historia sino con partes que eran hasta redundantes con eso de "Adolescente que adolecía", además que en un parráfo anterior ya habías dicho que habían pasado años, como sentenciando que el personaje había madurado o crecido lo suficiente.
Y es precisamente a partir de este párrafo que la historia comienza a parecerse a la película retratos de una Obssesión (One hour photo) de Mark Romanek y Robin Williams como protagonista (bastante zafado por cierto)
El final fue entretenido con esa dosis de humor negro.

Y de nuevo se me olvidó decir antes que nada, así que, después de todo, Bienvenido a este congalito de la señorita Ros y su ejército de hijos e hijas bastardas del blogger.

la MaLquEridA dijo...

Eso puede ser que hagan en los estudios fotográficos, espiar en cada foto revelada, robar instantes que no le pertenecen pero que les son permitidos ver, autorizados a meterse en la intimidad de unos momentos que no le pertenecen y cuando les toca estar del otro lado la situación cambia radicalmente.


Buen texto pero repites palabras que hacen perder un poco el hilo del relato.


Saludines.

Ros dijo...

Primero, bienvenido, un gustazo tenerte los domingos acá con la banda.

Fíjate que a mí también tu texto me recordó a esa película que comenta Sendic.

Siento que en general faltó cuidar esos detallitos de repetición de palabras, y comas/puntuaciones para darle más agilidad y limpieza
al texto.
Por ejemplo, en la segunda línea del primer párrafo quedan juntas la palabra gustaba:
...le gustaba capturarlas, veía algo que le gustaba"

También creo, pudieran sustituirse varias ies por comas, para que tu texto no se sature de estas.
Por decir acá:
"Ángela era curiosa y gustaba de ver la sudoración y el comportamiento torpe de Renato"
por,
"Ángela era curiosa, gustaba de ver la sudoración y el comportamiento torpe de Renato"

El final me gustó, me resultó escalofriante.
Los personajes como Renato me atrapan.

Saludo, :)

Unknown dijo...

Buena la historia, hay gente muy retraída, pero es casi imposible evitar socializar y más en un trabajo donde se tiene trato directo con las personas, aunque un universo gire en nuestra mente.

Dr. Gonzo dijo...

Mira que la idea de la historia es buena, pero hay elementos gastadones (mira quién habla)y no estarían mal si la forma de plantearlos es interesante. Por ejemplo su inmersión en las escenas en que se imaginaba es una gran idea que merecía máyor descripción. Creo que el asunto de que se inventaba historias con los fotografiados ya forma parte de lo que comentó Sendic de la peli. El final es matón, eso me gustó, pero sí agradecería que pulieras tu ortografía y redacción, tienes buenas ideas como para que las arriesgues por una forma de escribir mal estructurada.

Siracusa dijo...

Bienvenido a los Escribicionistas, lamento comentar hasta ahora :s pero ahi te voy:
Me gustó tu idea general, y estoy de acuerdo en que hay algunas cosas que pudiste haber quitado y otras haberlas explotado mas.
El final me parecio interesante, como dijeran en mi rancho, "el que las hace, no las conciente"
Y no te hablo de ortografia y esas cosas porque de eso peco fuertemente.
Nuevamente que bien que andes por aqui!!! :D