sábado, 10 de marzo de 2012

OBSESIÓN



Las miradas alojadas en mi pasado

caen devoradas por tu insistente nostalgia

como gotas desesperadas entre mis dedos;

las palabras se van dejando tu ausencia

y tu semblante callado entre mis versos,

dejando tu silencio

mi silencio

y la confusa  incertidumbre en mi garganta.

Me he reducido a plasmarte en estas líneas

 y a volver tu presencia una agonía,

a callar mi piel y mis párpados

cuando tocan tu piel,

a volverme fantasma

y  ocultarte en mis paredes

contemplando tu irremediable esencia.




4 comentarios:

akuanauta dijo...

Me gusta, el recuerdo de alguien en unos versos es la mejor forma de no olvidar.

Ros dijo...

Me gusta, y lo disfruté, y entré en el mood, y lo sentí, y un poquito me dolió.
Siento algunas imágenes muy buenas, sobre todo el final. =)

Dr. Gonzo dijo...

Comparto con Ros, el final es dolor y más dolor y una pizca de desesperación. El inicio fue el que sentí un poco flojo, pero como que ya me estoy acostumbrando en tus poemas, a considerar el todo para quedar gratamente impresionado. Bravo, dos al hilo.

Paco Payán dijo...

No poco salen bien librados en esas inmersiones al pasado, lo tuyo lo hace porque toca, transmite y sobre todo muestra que es cuestión de volver la mirada y darse cuenta que ahí están toda esa gama de sentimientos que dan como resultado un agónico poema. Me ha gustado bastante.

Saludos