viernes, 7 de octubre de 2011







Ravel


Frase repetida una y otra vez,
cosa sin esperanza y de la que nada cabe esperar.
Jean Echenoz

Habría que pensar en Hunting Bears como un pieza sin principio ni final, como un trozo de música que siempre ha estado ahí, como un sonido que viene de otro lado, un fragmento de algo más grande que se encuentra en otra parte y que de pronto aparece. Cuando se escucha, la sensación no es de un descubrimiento sino que se asemeja a la formalización de sonidos, como si de pronto tomase forma aquel hilo musical que pasa por nuestras cabezas en los días rutinarios y grises donde la vida se hace patente en su carencia de sentido. Intenten escucharla de camino a casa, con el cansancio del trabajo, en el metro mientras alguien te clava el codo en las costillas, con todos aquellos olores de sudor del día a día. Hay algo de cinematográfico en Hunting Bears presenta un campo completo de tiempo, su repetición permite la interiorización y su estructura genera una constancia que nos conecta con el pasado, cercano o lejano, incluso el que se proyecta en el “hubiera”.
Imaginen todas las escenas posibles, todos los personajes que pueden crearse con este fondo musical. Pero ¿Y la música? ¿La pieza en sí misma? ¿Cuál es el propósito de una pieza de este tipo? La música, como decía Cage, no se ocupa de propósitos sino de sonidos y se encuentra expresada en una paradoja: una falta de propósito intencionada o un juego sin propósito. 
La repetición, los silencios como pausas, alientos, carencia de sentido y juego infinito. Aparición no brusca, sin golpe, desvanecimiento apenas perceptible. Su existencia en otra parte pero siempre presente como formando parte de otros tantos ruidos con diversas formas me hizo recordar a Ravel. Y es que el Bolero también nos llega de otro lugar, viene desde la oscuridad, como un susurro que de pronto cobra existencia. No hay similitud en lo que respecta a los estilos musicales, lo sé, pero en la forma, en su esencia poseen el mismo juego sin propósito: “un suicidio cuya única arma es la ampliación del sonido”.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Había entendido esta rola sin saber entenderla. Me resultó extraña, divagante, confusa. Tu forma de describirla es muy realista y cierto es que nos lleva a muchos espacios sin pararse tan sólo en uno.
Me agrada tu forma y estilo. Felicidades.
Saludos!

Unknown dijo...

Es el mismo propósito que tienes Tú y todos los que, de alguna manera, dan a conocer su obra; aunque no haya unanimidad al aceptar cual es ese propósito, pero de origen, yo creo que es la simple expresión; y todo lo demás esta de más.
Tu texto transmite una interiorización bastante lúcida de tu consciencia y una exposición poderosa de tu imaginación.

Pinchesendic dijo...

Me preguntó si Cantinflas habría hecho alguna película del bolero de Hunting Bears. Un texto bastante imaginativo y con ciertas afirmaciones que podrían parecer e incluso llegar a ser verdaderas, pero también es cierto que mucha parte de lo escrito es meramente subjetivo.
Fue agradable leer algo así que ponga a pensar y reflexionar un momento.

Siracusa dijo...

Sólo puedo decir que me gusta tu estilo que por lo que he podido leer esta bien definido, creo que tienes ya un buen de experiencia en esto de la escritura.
De tu escrito me gusta esa forma de situarlo en un punto y a la vez ninguno, el epígrafe introduce perfectamente tu texto. :D

Alejandro Aguilar dijo...

Chale, todos aca, bien explayados y yo nomas pienso que este texto con la rola de fondo, me da para un "viaje"






Dark Angel

Dr. Gonzo dijo...

Me gusta la descripción que haces, porque muestra las capacidades de mucha gente para poder imaginarse o inspirarse sobre los sonidos. Yo entiendo lo de Cage acerca de los sonidos (un propósito en sí, de hecho) porque cuando escucho música instrumental, me clavo en los arreglos, en los acordes, tonos, estilo de tocar, técnicas usadas en el audio, la grabación, la producción, el rack de los músicos... los sonidos netamente... me es casi imposible imaginarme escenarios o cosas por el estilo. Por eso mi propósito fue hacerle una letra a esa rola y de eso trató mi escrito. Porque de otra manera no habría tenido este propósito. Parafraseando al señorón Derek Bailey, diría que imaginar con la música no es una cuestión del por qué hacerlo, si no de qué más se puede hacer.

Ros dijo...

Tu texto me resultó instructivo y deleitante a la vez.
Y bueno, tu narrativa me parece profesional.
Yo que carezco de una memoria musical, agradezco este tipo de descripciones; me hiciste imaginar lo que yo no pude con esa canción.